LAS CARTAS DE LOS
MAHATMAS.
CARTA N°. 131
Carta de T. Subba
Row a A. P. Sinnett
APENDICE
CARTA N° 131
Coconada, 26 de
junio de 1882.
Al señor A.P.
Sinnett, Esq., etc. etc. Estimado señor,
Le ruego tenga la
amabilidad de disculparme por no haberle enviado una respuesta a su carta hasta
hoy. La aceptación en parte, que usted tuvo la amabilidad de dar a las
condiciones expuestas por mí, necesitaban ser sometidas a la consideración de
los Hermanos para conocer su opinión y sus órdenes. Y ahora, siento informarle
que nada parecido a una instrucción práctica del ritual de la Ciencia Oculta es
posible en las condiciones que usted propone. Las
reglas establecidas por los antiguos instructores de la Ciencia Oculta son inflexibles
y no se ha dejado a la discreción de ningún instructor el que se cumplan o no, según
la naturaleza de las circunstancias imperantes. Si usted encuentra que es imposible cambiar su modo
actual de vida, no le queda más que esperar para recibir instrucción práctica hasta
que esté usted en disposición de hacer esos sacrificios que la Ciencia Oculta
exige; y por el momento, tiene que contentarse con la instrucción teórica a
medida que se le pueda ir proporcionando.
Resulta innecesario
informarle ahora si la instrucción que se le prometió en mi primera carta, según
las condiciones allí expuestas, desarrollaría en usted aquellos poderes que le permitieran
lo mismo ver a los Hermanos que conversar con ellos clarividentemente. El entrenamiento oculto, una vez empezado y
con el transcurso del tiempo desarrollará, necesariamente, esos poderes.
Pero demostraría usted una visión muy pobre de la Ciencia Oculta si llegara a
suponer que la mera adquisición de poderes psíquicos es el único y más óptimo
resultado del entrenamiento oculto. La mera adquisición de poderes de efecto milagroso,
jamás puede garantizar al estudiante de la Ciencia Oculta la inmortalidad, a
menos que haya aprendido el medio para transferir gradualmente su sentido de individualidad,
desde su cuerpo material corruptible al incorruptible No-Ser representado por
su séptimo principio.
Le ruego que
considere éste el verdadero objetivo de la Ciencia Oculta y que vea si las
reglas a las que se le pide que obedezca son necesarias o no, para que se
produzca este cambio considerable.
En las actuales
circunstancias, los Hermanos me han pedido que les asegure, a usted y al señor
Hume, que yo estaría completamente dispuesto a proporcionarles a ambos, hasta
donde sea capaz, esa enseñanza teórica relacionada con la Filosofía de la
antigua religión Brahmánica y del Buddhismo esotérico.
Voy a dejar este
lugar para trasladarme a Madrás el 30 de este mes.
Quedo sinceramente
suyo,
T. SUBBA ROW
No hay comentarios.:
Publicar un comentario